Mayabeque, Cuba: Cada 14 de noviembre, el mundo se une para visibilizar una de las enfermedades crónicas más extendidas y desafiantes de nuestro tiempo: la diabetes. Esta fecha conmemora el nacimiento de Sir Frederick Banting, descubridor de la insulina junto a Charles Best en 1921, un hallazgo que transformó millones de vidas.
Desde 1991, la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la OMS impulsan esta jornada, reconocida por la ONU desde 2006, para promover conciencia, prevención y atención oportuna.
Este 2025, el lema es ?La diabetes y el bienestar?, con énfasis en los desafíos que enfrentan las personas con diabetes en el entorno laboral. Se busca fomentar espacios inclusivos, donde el bienestar físico y emocional sea prioridad.
Las cifras son alarmantes: más de 537 millones de personas viven con diabetes, y se estima que podrían superar los 640 millones en 2030. En América Latina, el sobrepeso y la inactividad física agravan esta epidemia silenciosa.
La detección temprana es clave, especialmente en la diabetes tipo 2, que puede pasar desapercibida durante años. Chequeos regulares, educación en salud y estilos de vida saludables son esenciales para frenar su avance.
Vivir con diabetes implica responsabilidad diaria, tanto del paciente como de su familia. El acompañamiento emocional, la alimentación adecuada y el apoyo constante son pilares fundamentales.
En este Día Mundial de la Diabetes, el llamado es claro: rompamos el silencio, hablemos con empatía y construyamos entornos donde el bienestar sea un derecho, no un privilegio. Porque prevenir, cuidar y acompañar también es un acto de amor.
