Un Congreso que apuesta por el futuro.

La Habana, Cuba: Cuando este 1ro. de junio el mundo celebra el Día Internacional de la Infancia, en Cuba -país que tiene como premisa la defensa de los derechos de sus niños y jóvenes-, concluyó el Primer Congreso Internacional sobre Infancias y Adolescencias “Creciendo al futuro”, que desde el pasado lunes sesionó en el Centro de Convenciones y Feria “Plaza América” de Varadero, publica Radio Reloj.

A la sesión de clausura del evento, que reunió a más de 300 delegados de una treintena de naciones, asistió este jueves el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

Junto a otras autoridades del Partido, la Unión de Jóvenes Comunistas y el Gobierno, estuvieron presentes, además, representantes de organismos, instituciones y organizaciones del país, investigadores y activistas sociales.

El foro, coordinado por el Centro de Estudios de la Juventud de Cuba, debatió importantes temas referidos a los desafíos globales para que niños y adolescentes gocen de políticas públicas que garanticen un futuro mejor, con mayor participación, atención y bienestar.

Este Primer Congreso Internacional se realizó en un significativo momento para la Mayor de las Antillas, cuyo Gobierno elabora una “Política integral de niñez y juventudes” que próximamente será presentada a la Asamblea Nacional del Poder Popular.

En las palabras de clausura Jorge Luis Broche Lorenzo, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista y jefe de su departamento de Atención al sector Social, destacó la concepción académica, cultural y social de este Congreso, que permitió el acercamiento a algunas de las investigaciones y propuestas más recientes y novedosas en este campo.

Al hacer un recuento de las principales conquistas alcanzadas por Cuba en la materia, el dirigente partidista mencionó la Constitución de la República, que brinda especial protección a los niños, adolescentes y jóvenes, y el recientemente aprobado Código de las Familias, el cual contempla normas que legitiman los derechos de los más pequeños.

Broche Lorenzo subrayó que a pesar de los esfuerzos hechos por la Revolución para garantizar igualdad de oportunidades para todos, hay niños y jóvenes que permanecen en situación de desventaja social.

En ese sentido, puntualizó que en la actualidad en Cuba se retoman programas que se desarrollaron con éxito, a partir del año 2 000, como expresión de la voluntad política del Gobierno de fortalecer sus estrategias destinadas a los sectores poblacionales de mayor vulnerabilidad.

“Es este el contexto que nos reafirma la necesidad de formular una política para la niñez y las juventudes, que nos proporcione una Ley en el país”, enfatizó el miembro del Secretariado del Comité Central.

Desde el desenfado de sus pocos años, la estudiante de Secundaria Básica Lucía Travieso convocó a que quienes están encargados de educar a las más jóvenes generaciones, lo hagan desde la creatividad, “para lograr que la escuela y la familia sean verdaderos espacios de amor”.

En el contexto de la actividad fueron reconocidos varias instituciones y proyectos que se han destacado por su trabajo con la infancia y la adolescencia.

De manera especial, se obsequió al Presidente Díaz-Canel la obra Viva Cuba, una pintura de Máisel López, “como regalo de los más jóvenes a un gran reparador de sueños”.