El conocimiento de la localidad donde una habita es importante, incentiva el respeto y el sentido de pertenencia; el saber siempre arropa y fortalece, de ahí que es vital el trabajo con los estudiantes desde edades tempranas.
Cuanto propicia la escuela a favor del aprendizaje es imprescindible, máxime cuando ello afianza la historia de la localidad y más allá de cuanto nutre en las aulas anima a visitas especiales como los museos.
El encuentro de la museóloga Mery Pino con estudiantes de la escuela primaria Víctor Mestre resulta una cita de notoria reciprocidad, aprenden los alumnos y también la anfitriona gana el afecto y admiración de quienes desde ese minuto incorporan a sus vidas la historia local.
Aplausos para quien con toda sabiduría logra cautivar la atención y participación de niños y niñas en un encuentro que quedará por siempre en la memoria.
Hay tanto camino por recorrer, que enrumbar los pasos hacia el conocimiento de la historia misma del lugar donde se vive es esencial si querremos que las generaciones presentes y futuras conozcan sus raíces y amen cada espacio de su entorno.
El arte de quien enseña, la manera del decir desde la franqueza y el saber despierta curiosidad, pero también la admiración por los sucesos y protagonistas que labraron el presente.
Fomentar visitas a museos, incitar el conocimiento y la investigación son vías seguras en la formación cabal de los estudiantes, pues en ello también se afianzan valores siempre imprescindibles para el mejoramiento humano. (IVP)