Ante el llamado: Presente

Mayabeque; Cuba: Tras el paso del huracán Rafael y ante la convocatoria del Consejo de Defensa Provincial (CDP), las organizaciones políticas y de masas apoyaron en la etapa de recuperación con el fin de resarcir los perjuicios y garantizar la calidad de vida del pueblo.

Ante este llamado respondió Marlén Sosa Cruz, Secretaria General del Comité Provincial de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en Mayabeque.

A partir de la convocatoria que se realizó en nuestra provincia, luego del paso del huracán Rafael, la CTC de Mayabeque tuvo la oportunidad de sumarse a las acciones de recuperación, en la higienización y limpieza fundamentalmente en los municipios más afectados como el Consejo Popular de Camacho en Batabanó, La Salud en Quivicán, Melena del Sur, Bejucal y San José de las Lajas.

Los trabajadores mayabequenses participaron en la chapea de áreas verdes, recogida y limpieza de zanjas para que sea una provincia bonita como estamos acostumbrados. Contamos también con la voluntad y el compromiso de los trabajadores del sector del comercio y de la agricultura en la venta de productos alimenticios para nuestro pueblo.

Es meritorio reconocer el desempeño de nuestros obreros de la Empresa Eléctrica de Mayabeque y de nuestros hermanos villaclareños que recuperaron las redes eléctricas. Debemos significar también la labor de los trabajadores del sector de Recursos Hidráulicos, los de Mantenimiento Constructivo y de Mantenimiento Vial. En general fue una muestra de compromiso y sentido de pertenencia por recuperar lo antes posible a nuestra provincia.

Ante la convocatoria Mayumi León Quintana, Secretaria de la Federación de Mujeres Cubanas en Mayabeque, asumió diferentes tareas.

Una vez que se nos dio la fase informativa, la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en Mayabeque comenzó a trabajar desde las comunidades con el fin de preservar sobre todo las vidas humanas.

Estuvimos inmersos desde los comités municipales y de los bloques en todo lo relacionado con la evacuación de las personas, de las madres con tres hijos y familias en situaciones de vulnerabilidad y los acompañamos mientras pasaba este efecto meteorológico; una vez transcurrido, evaluamos los daños junto al Consejo de Defensa.

Hemos estado inmersas en las tareas de higienización y saneamiento en los barrios, en las comunidades, entregando los donativos a todas las personas afectadas. Participamos en la elaboración de alimentos para las personas que no tenían fluido eléctrico.

Tuvimos el privilegio de ser acompañadas del Secretariado Nacional de la FMC. Recientemente nos visitó Teresa Amarelle Boué, nuestra Secretaria General y trabajamos en la comunidad de Camacho,  en Batabanó, sobre todo en la recogida de escombros, de árboles caídos; y visitamos también a los ancianos del Sistema de Atención a la Familia (SAF) de esa zona.

Nos satisface ver esa unidad que caracteriza a los cubanos y a las cubanas, al hacer una caldosa y ofrecérsela a quien más la necesitaba; ver la atención que brindaron las familias batabanoenses a los linieros de Mayabeque y de Villa Clara en la recuperación del sistema eléctrico.

Fue un momento propicio para llegar a las trabajadoras del sector no estatal y a las que tienen Proyectos de Desarrollo Local (PDL) quienes de forma desinteresada han ayudado a todo el que lo necesite.

Seguimos trabajando. Seguiremos apoyando a las personas; le damos nuestro apoyo; pero no lo hacemos solas, nos acompañan los Comités de Defensa de la Revolución (CDR). Fue una satisfacción también atender a Aliuska, esa primera liniera que tiene Cuba, una mujer muy valiente, madre de 3 hijos. Dejó a sus niños al cuidado de su mamá y vino con su esposo liniero también,  porque aquí es donde era más útil; y a nosotras nos tocó atenderla a ella y a su familia en Villa Clara.

Yenisley Roque Rivero, Miembro del Buró Político Ideológico de la Unión de Jóvenes Comunistas fue otra de las dirigentes que marchó al frente en Mayabeque en las labores de recuperación.

Nuestros jóvenes estuvieron activos en los municipios más perjudicados por el huracán Rafael que fueron: Bejucal, Quivicán y Batabanó. Allí apoyaron la recogida de desechos sólidos y los escombros. Realizamos trabajos productivos en las áreas dañadas. Les llevamos donaciones a los damnificados y compartimos con los niños, adolescentes y jóvenes de esos lugares. Para realizar estas actividades se activaron la Guerrilla 13 de marzo con jóvenes de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) y las Brigadas Estudiantiles del Trabajo (BET) con miembros de la FEEM, quienes apoyaron a los Consejos de Defensa Municipal (CDM). Contribuimos también en la recuperación de algunas viviendas dañadas y en la limpieza de los parques. (rda)