Nosotras, vencedoras de imposibles. Foto: Facebook

Mayabeque, Cuba: Cuando un grupo de mujeres cubanas nos reunimos aparece un tema que destaca sobre otros, la innovación culinaria. Así una dice cómo hacer mayonesa sin huevo, la otra como lograr que el arroz crezca más o qué hacer para suplir la ausencia de los frijoles en el plato.

Así transcurrieron algunos minutos, mientras una veintena de delegadas esperaban para comenzar la tercera de las comisiones previas a la Asamblea Onceno Congreso de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en Jaruco.

Como protagonistas diarias que son del duro bregar cotidiano, debatieron sobre prevención y atención social en las comunidades.

Desde su experiencia Juliana habló sobre el embarazo en la adolescencia y de cómo este fenómeno puede llegar a cualquier familia, incluso a las que no presentan disfuncionalidad.

Merlis, por su parte, conoce de cerca a mujeres aparentemente empoderadas y que aceptan la violencia manifiesta de sus esposos porque simplemente la han normalizado.

Anayfer cree que aún no es suficiente la educación sexual en las escuelas, porque esta, casi siempre, se limita a la parte reproductiva y de prevención de embarazos y enfermedades, dejando de lado cuestiones psicológicas y de derechos.

Amor, insistió sobre el papel que puede jugar la cultura si se imbrica al trabajo preventivo y la importancia de una atención diferenciada a las mujeres y las niñas campesinas, eslabones fundamentales en la producción de alimentos.

En tono jocoso Dania, expresó que en cada cubano o cubana hay un meteorólogo, un médico, un experto en política internacional, pero la sapiencia se queda coja en materia de legalidad. “Quizá sea porque nos adaptamos a vivir en una sociedad noble y tranquila. El caso es que hay muchas lagunas en las mentes de nuestro pueblo y de muchos decisores, que afectan el ejercicio pleno de nuestros derechos”.

Yohanka transmitió la preocupación de las federadas de su bloque sobre, por qué, ante una jubilación, hombres y mujeres se benefician por igual del porciento estipulado por años de servicio si las mujeres nos retiramos con menos edad. Esto nos pone en desventaja y más cuando, la mayoría, sufre el efecto desgastador de la conocida doble jornada laboral.

La doctora habló sobre las formas en que la dinámica demográfica actual afecta a las mujeres, de la importancia de revitalizar la labor preventiva del médico y la enfermera de la familia junto a las organizaciones en la base y de los retos que hoy se presentan para lograr la salud sexual y reproductiva en medio de tantas limitaciones económicas.

Ideas, sugerencias, críticas y planteamientos surgieron del debate donde mujeres de diferentes sectores y comunidades nos preparamos para, desde nuestro papel de delegadas a la Asamblea Onceno Congreso de la FMC en Jaruco, representar a las mujeres del municipio.

La cita del sábado 25, coincide con una fecha cargada de simbolismo. Recordaremos a Fidel, creador junto a Vilma de nuestra organización femenina en un nuevo aniversario de su partida física y vestiremos de naranja, porque también celebraremos el Día Mundial de la No Violencia Contra Las Mujeres y Las Niñas. (IVP)

Yuliet Romero