Un proyecto para impulsar la producción ovina y caprina

Mayabeque, Cuba: La producción ovina y caprina en Cuba atraviesa un proceso de transformación impulsado por la ciencia y la innovación. El proyecto coordinado por el Doctor en Ciencias Javier Herrera Toscano, investigador titular del Instituto de Ciencia Animal (ICA), integra la tecnología y el conocimiento técnico a los sistemas productivos de estas especies, en las provincias de Mayabeque y La Habana.

La iniciativa tiene como objetivos fundamentales fomentar la aplicación de tecnologías en la producción ovina y caprina, así como fortalecer la integralidad de las fincas. Muchas de estas unidades productivas manejan simultáneamente diferentes especies animales y de cultivos, por lo que se busca integrar todos los elementos e implementar acciones en función de una producción más eficiente y la sostenibilidad.

El trabajo se desarrolla en varias etapas. En una primera fase se realiza un diagnóstico a profundidad de cada finca, evaluando cerca de 66 variables distribuidas en dimensiones productivas, medioambientales, sociales y tecnológicas. A partir de estos datos se establece una línea base para monitorear el desarrollo de cada escenario a lo largo de los cuatro años que abarca el proyecto.

“Hasta la fecha, se han diagnosticado 47 escenarios productivos en Mayabeque, especialmente en municipios como San José de las Lajas, Güines, Madruga y Nueva Paz”, comentó el doctor Herrera. Se espera ampliar el alcance del proyecto a Santa Cruz del Norte y Jaruco, aunque las restricciones logísticas han limitado esa expansión.

Ciencia al servicio de la producción  

El equipo del proyecto está conformado por 14 profesionales, entre médicos veterinarios, ingenieros agrónomos, químicos, economistas y otros especialistas vinculados al sector agropecuario.

A la labor del Instituto de Ciencia Animal, entidad rectora del proyecto, se le suma la colaboración de instituciones como la Universidad Agraria de La Habana (UNAH), la Asociación Cubana de Producción Animal (ACPA), la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) y la Empresa de Ganado Menor (EGAME).

Durante cada visita a las fincas se identifican deficiencias y proponen soluciones tecnológicas concretas. Además, se capacita a los productores, lo cual permite una divulgación más amplia de las buenas prácticas y tecnologías disponibles.

Una de las metas principales es identificar y fortalecer a los productores líderes del territorio, cuyas fincas puedan convertirse en referentes para el resto de la comunidad. Tal es el caso de Miguel Alfonso Pulido, productor de San José de las Lajas, quien forma parte del proyecto junto a su familia y ha sido reconocido en eventos como la Feria Internacional Agroindustrial Agropecuaria (FIAGROP).

Hacia una red de innovación

El proyecto contempla también la conformación de una red de innovación para la producción ovina. Esta red busca articular a diversos actores del territorio: centros de investigación, universidades, medios de comunicación y otras instituciones, en función del desarrollo agropecuario. El objetivo es crear un ecosistema colaborativo, que permita responder a los retos del sector.

Uno de esos retos es el hurto de ganado, una problemática que afecta significativamente a los productores. En este sentido, el equipo ha identificado la necesaria integración de los órganos de la policía, para diseñar estrategias preventivas que protejan el patrimonio de los campesinos.

“Queremos lograr que cada institución juegue su papel en función del avance de los sistemas de producción”, afirmó el doctor Herrera Toscano, quien apuesta por un modelo de desarrollo que no actúe de forma aislada, sino desde la cooperación interinstitucional.

A casi un año de haber iniciado, el proyecto ya muestra avances tangibles en la caracterización y capacitación de las fincas. A medida que se consoliden los resultados, se espera que su impacto se multiplique y contribuya a fortalecer la producción ovina y caprina en el país. (rda)

Laymara Alfonso Guedes