Batabanó enfrenta uno de los peores momentos desde el inicio de la pandemia reportando altas cifras de contagio con Covid-19, lo que pone en alerta máxima a las autoridades de salud pública y al Grupo Temporal de Trabajo, en función de reforzar las medidas de prevención y control de la enfermedad.
Entre el 2 y el 6 de agosto la municipalidad reportó 327 infestados y tres muertes, cifras similares a la de la semana anterior. La situación es muy compleja teniendo en cuenta la dispersión del virus en los diferentes Consejos Populares.
Algunos se preguntan ¿por qué Batabanó está en esta situación?, pero, solo hay que mirar a nuestro alrededor para darnos cuentas que tenemos que ser más disciplinados.
Otros, se manifiestan inconformes ante las medidas de restricción de movimiento, decisiones que una y otra vez han sido necesarias adoptar en esa costera localidad, pero, pregunto, ¿han cumplido todos con las prohibiciones, han respetado el distanciamiento social, aplazaron las visitas a familiares y amigos?
La respuesta a estas a estas interrogantes hay que buscarlas entre todos, desde el inicio de la pandemia los medios de comunicación han informado una y otra vez acerca del contagioso virus, cómo evitarlo, qué medidas debemos cumplir como el uso del nasobuco y la higiene personal. La situación actual demuestra que incumplimos los protocolos sanitarios.
Pero no estamos solos, a Batabanó llegó una brigada del contingente Henri Reeve, una decisión de la Dirección Provincial de Salud Pública, para reforzar los servicios en los cuerpos de guardia de los policlínicos ubicados en la principal área residencial y en Surgidero de Batabanó y a los pacientes enfermos de Covid-19 que permanecen ingresados.
Los ciudadanos de esta municipalidad ya realizan el ciclo de vacunación con Abdala, las autoridades gubernamentales y de salud pública priorizan la atención al territorio, entonces, como ciudadanos, nos corresponde responder a esos esfuerzos y cumplir con las medidas orientadas para la actual etapa: compleja, difícil, dolorosa, pero, juntos podemos revertir la situación. Esperar, mantenerse al margen, obviar, son palabras que debemos desterrar si queremos devolver a Batabanó su rostro habitual. (adm)
