Froiln Antonio Gutirrez

Mayabeque, Cuba: Un hombre atesora una rica historia. Es Héroe de la República de Cuba y se siente dichoso. Toda una vida dedicada al sector azucarero le ha proporcionado muchas satisfacciones. Froilán Antonio Gutiérrez Felipe, de padre campesino, con apenas 14 años de edad aprendió a cortar la caña. En días alternos ayudaba a derribar unas 300 arrobas en la finca familiar. Entonces no había triunfado la Revolución Cubana.

“Recuerdo que a finales de enero de 1959, me incorporé a las milicias campesinas, y al ejército de occidente, después de la desmovilización comencé a trabajar en el central Camilo Cienfuegos, en Santa Cruz del Norte, como cenicero en las calderas, entonces corría el 1965”.

Pronto Froilán se dio a conocer entre los obreros”asumí cada tarea con responsabilidad y eso hizo que fuera seleccionado cuadro de desarrollo del taller de forja o herrería, como también le llaman. Allí estuve hasta la jubilación, aunque después me mantuve activo para ser útil y aprovechar todos los conocimientos aprendidos”.

Con él se puede hablar del mantenimiento a las combinadas cañeras, en el central Boris Luis Santa Coloma de Madruga o de la reparación de algunos de los equipos del petróleo, de las fábricas de levadura en Santa Cruz del Norte, o la de Cerámica de San José y la Holguín.

Es un hombre inteligente y eso le valió para asumir con éxito la innovación tecnológica y la inventiva, mantener en funcionamiento cada equipo, e incrementar la capacidad de producción para sustituir la compra de piezas a altos costos en el mercado extranjero.

La industria azucarera forma parte importante en su vida, le digo, y con una sonrisa entrecortada me cuenta: “lo viví en carne propia, como dijera el Comandante en Jefe Fidel Castro, es de los trabajos que más aprecia el hombre, a pesar de que es duro, pero en tantos años aprendí mucho, lo que me posibilitó realizar múltiples innovaciones y ahorrar millones de pesos en el ingenio y además evitar largas interrupciones en la jornada laboral”.

“Fui muchos años vanguardia nacional, y el 1 de mayo de 1997, el Comandante en Jefe me impuso la medalla de Héroe del Trabajo de la República de Cuba”, comenta, “es como tener en el pecho la bandera cubana, eso compromete a uno para toda la vida, ese es mi principio”.

Y estar cerca del Comandante fue de los momentos más grandes que ha vivido Froilán Antonio Gutiérrez Felipe, “era estar cerca del guía del mundo, como para predecir el futuro de la humanidad”, expresó.

Pero también he seguido el legado del Che, “fui vicepresidente de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores en la Habana, tuve la oportunidad de realizar muchos trabajos durante varios años y me sentía feliz, y dichoso por generar ideas y cosas novedosas”.

“Le diré algo, refiere, el oficio del herrero me sirvió de mucho, es uno de los más productivos que existen, en el taller le hacía los tornillos a las pestañas de los molinos de los 16 centrales y los tornillos de los carros de cala de todo el sistema de ferrocarril”.

Allí fabricaba accesorios para combinadas, y ganchos para tuberías de riego, también produje armas de esgrima como espadas, floretes, y sables, eso lo aprendí en Francia”.

Un campesino Héroe del Trabajo de la República de Cuba “imagínese usted, más de 70 años, viví la miseria de Cuba antes del 59 y este Título Honorífico hace que me sienta agradecido de la Revolución.”(adm)

Indira La O Herrera

Periodista en Radio Mayabeque

 

Por Indira La O Herrera

Periodista en Radio Mayabeque  

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *