Caracas: La postulación de candidatos a las elecciones legislativas de diciembre signó esta semana el escenario político de Venezuela, impactado hoy de lleno por las repercusiones del indulto presidencial a más de 100 opositores, publica Prensa Latina.
El primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, destacó la fortaleza de la alianza del Gran Polo Patriótico -compuesto por nueve organizaciones afines a la Revolución Bolivariana-, al acudir ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) a formalizar las candidaturas del bloque unitario.
Cabello subrayó el compromiso del PSUV y los partidos aliados de ir a la conquista de la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral) para ponerla al servicio del país.
‘Creemos firmemente en la democracia, en el voto popular y en la conciencia del pueblo’, aseveró el dirigente socialista al reiterar el llamado a participar en los comicios para renovar el ente legislativo, bajo el control de la oposición desde 2016 y declarado en desacato por el Tribunal Supremo de Justicia.
Diversas organizaciones de la derecha también concretaron coaliciones para intervenir en los comicios, en respaldo a la opción del voto como única alternativa para dirimir las diferencias políticas.
La formalización de las candidaturas de los bloques Alianza Venezuela Unida y Alianza Democrática demostró la voluntad predominante en la oposición de optar por las vías democráticas para concretar su agenda política, frente a los insistentes llamados a la abstención por parte de un sector liderado por Juan Guaidó, con el respaldo de Estados Unidos.
Adicionalmente, el indulto otorgado a más de 100 dirigentes y activistas opositores con procesos judiciales abiertos, bajo privación preventiva de libertad o requeridos por la justicia por delitos contra la paz nacional, ratificó la voluntad de diálogo del gobierno bolivariano y contribuyó a cimentar aún más el clima de confianza rumbo a los comicios.
Valorada como positiva por voceros de la derecha, además de organismos internacionales como la Unión Europea, la medida adoptada por el mandatario Nicolás Maduro buscó la promoción de la convivencia pacífica a través de la apertura del cauce democrático, según fuentes oficiales.
Ante este escenario, Estados Unidos ratificó su postura hostil e injerencista al imponer medidas coercitivas contra la presidenta del CNE, Indira Alfonzo, dos de sus rectores principales, y el procurador general de la República, Reinaldo Muñoz, con el fin de boicotear el proceso electoral.
Venezuela denunció la nueva maniobra de la administración estadounidense de Donald Trump para interferir en las elecciones legislativas del 6 de diciembre; ‘ninguna presión externa podrá evitar que el pueblo venezolano ejerza su derecho al voto y decida su destino de manera soberana’, subrayó un comunicado de la cancillería.
La renovación del máximo órgano comicial y la convocatoria al sufragio para renovar la Asamblea Nacional formó parte de los acuerdos parciales emanados de la mesa de diálogo instalada en septiembre de 2019 entre el gobierno de Venezuela y varios partidos opositores. (LHS)
