Mayabeque, Cuba: Al cierre del pasado año en Jaruco, 895 mujeres se realizaron la prueba citológica o test de Papanicolau para el diagnóstico del cáncer cérvico uterino y de ellas se hicieron el examen por primera vez, poco más de 59 que arribaron a los 25 años de edad.
El número de pacientes que accedió a esta prueba decreció en relación al 2021 como consecuencia de la pandemia del coronavirus y sobre todo por las limitaciones de recursos materiales derivadas del recrudecimiento del bloqueo económico comercial y financiero de Estados Unidos.
La enfermera de la Consulta de Patología de Cuello del Policlínico Noelio Capote, Licenciada Ailín Isern Espín, dijo que desde hace más de un año enfrentan la escasez de láminas, aplicadores ginecológicos y otros insumos indispensables para las citologías.
La Consulta de Patología de cuello de Jaruco, se ha visto afectada también por el déficit de productos como el ácido acético, fundamental para visibilizar a través del videocolposcopio las lesiones malignas o premalignas, apuntó.
No obstante, excepto en julio y agosto, los meses críticos de la pandemia, Jaruco mantuvo el seguimiento a las más de 500 pacientes con cáncer cérvico uterino en sus diferentes estadios, no solamente del municipio, sino también de Madruga, Santa Cruz del Norte y San José de Las Lajas.
Gracias a la dedicación de los especialistas involucrados en el programa en la red de consultorios médicos y las consultas de Patología y Patología benigna no se reportaron fallecimientos asociados a este tipo de neoplasia.
Vale destacar, que la Consulta de Patología de cuello de Jaruco, a cargo del Especialista de Obstetricia y Ginecología Dr. Marcial Lesteiro retomó sus horarios habituales en enero tras la reparación del Video colposcopio, equipo situado en el Policlínico Noelio Capote en 2009 al calor del Estudio Integral a la Familia Cubana encaminado en su momento al diagnóstico, tratamiento y prevención de cinco tipos de tumores malignos.
El bloqueo es hoy la principal barrera para trabajar de manera más eficiente en el control de una enfermedad que constituye la quinta causa de muerte en Cuba, según el anuario estadístico de 2019.
En tanto se flexibilicen las medidas de la cruel política imperial los especialistas de Jaruco ven frustradas sus aspiraciones de ampliar el acceso a la prueba citológica y a otros métodos diagnósticos a las féminas de edades adolescentes.
Este grupo de la población que inicia de manera precoz y muchas veces sin protección las relaciones sexuales, también puede infectarse con el Virus del Papiloma Humano (HPV), principal factor de riesgo para desarrollar cáncer cérvico uterino. (BSH)
