Como una luz que brilla intensamente en la memoria de todos los cubanos, así recordamos al Apóstol en su aniversario, José Martí de América, del mundo.
Nació en la calle Paula, con la convicción de revolucionario y lo demostró desde bien joven. El dolor de su patria oprimida, la esclavitud y el maltrato a los humildes hicieron de él un hombre justo y no calló ante tales atrocidades.
Con solo 17 años sufrió prisión. Esa imagen sirvió para las nuevas generaciones, pues ellos impulsan todos los procesos independentistas de nuestro país.
Pero, el Maestro también dejó a los jóvenes reflexiones y enseñanzas que estimulan a la educación y la superación, pues “Ser cultos, es el único modo de ser libres”.
El Martí joven, no creyó en cadenas ni limitaciones. Su legado está vigente en los médicos internacionalistas, en los estudiantes universitarios que realizan pesquisas para detectar posibles casos de Covid-19.
Los pinos nuevos de hoy tenemos mucho que aprender de Martí, seguir sus enseñanzas significa preservar su memoria, la de nuestro pueblo, una identidad que nunca va a morir, pues, es una luz que brilla intensamente en la memoria de todos los cubanos. (IVP)
