Mayabeque, Cuba: El patio de Marcelino Osorio y Teresa Mantilla se convirtió en espacio productivo para la multiplicación y desarrollo de la Codorniz Japonesa.
Desde hace casi 9 años esta pareja logra el crecimiento de la crianza y estabilización de las aves, ricas en proteínas.
El proyecto es el resultado de la voluntad y el deseo de contribuir con la soberanía alimentaria y tiene gran impacto en la comunidad, ubicada en el municipio de San Nicolás.
Según Marcelino, “Este proyecto surgió por la necesidad que existía en el territorio para obtener carne de codorniz para la alimentación de los niños y los huevos para las mujeres embarazadas”.
Teresa, argumenta, “estamos aportando y donando lo que nosotros tenemos de codorniz y sus huevos al Hogar Materno de la municipalidad y la escuela de ciencias médicas, Arocha, en Güines”.
En poco menos de 18 metros cuadrados, esta pareja de nicolaseños contribuyen con la sustitución de importaciones, garantizando una alimentación dentro de los parámetros nutritivos, acordes a las indicaciones del país, teniendo un patio de referencia en la agricultura urbana, suburbana y familiar.
“Nosotros tenemos aquí 520 codornices entre hembras y machos, aproximadamente y recogemos unos 160-170 huevos diarios”, acotó Marcelino Osorio.
Satisfechos de sus logros, ahora dirigen sus esfuerzos en continuar produciendo. (adm)
