La historia de Cuba está ahí, nada ha sido fácil o gratis, a fuerza de tenacidad y coraje hemos conquistado lo que tenemos y construido nuestro destino.
El amor a la patria y el sagrado deber de defenderla es intrínseco de los cubanos, una cuestión que nos identifica y distingue, una decisión a toda prueba.
Por qué cuesta tanto entender la voluntad libertaria y soberana de una nación que ama, construye, comparte realidades y sueños con el placer de servir.
La historia de Cuba está ahí, forjada con la fuerza del pueblo y el propósito irrenunciable de tener una patria cada vez más digna y justa para todos.
Sus páginas están llenas de heroísmo y valor, de la proeza de sus hijos más valiosos que a Cuba entregaron esfuerzo y vida en aras de la independencia.
Por qué cuesta tanto entender que no bajaremos la cabeza ni nos pondremos de rodilla, que no hay cabida aquí para el odio y la violencia.
Basta revisar la historia de las últimas seis décadas para comprobar que no hay fuerza por malvada y potente capaz de destruir la mayor de nuestras obras: la Revolución Socialista.
El fracaso ha sido y será el premio al obstinado empeño de hacernos rendir, nada ha cambiado, por qué cuesta tanto entenderlo: La historia de Cuba está ahí. (BSH)