Mayabeque, Cuba: Campesinos de Mayabeque potencian el cultivo de plantas exóticas. En la finca Atalaya 1 el aroma se esparce por doquier y florecen sembradíos que son difíciles de encontrar en nuestro país, pues muchos son injertos o variedades obtenidas por diversos métodos, según precisa el joven Yanier Quiñones Izquierdo.
El productor dice que en su parcela tiene alrededor de 1 500 a 2 000 plantas, que incluyen diferentes especies entre ellas la flor cadáver, que casi nadie conoce ni la tiene.
El verdor de las plantas junto a una amplia gama de texturas y colores embellece este sitio natural de Mayabeque.
Entre las de su preferencia el joven mencionó a las violetas africanas, ya que las considera hermosas y son muy trabajosas, lo que significa un desafío para él, ya que la reproducción es por hoja, demora tres meses y tiene que mantenerse con una temperatura estable entre los 20 y 24º Celsius para lograr su adecuada germinación.
También se refirió a los Adenium, que son especies puras dentro de su colección, con colores muy vibrantes, entre ellos el black canyon, cuya flor es negra exactamente el primer día y después va cambiando a un tono rojizo, también habló del Indio Blaise, de un morado muy intenso y el 22 que es una flor blanca con todos sus filos en rosa.
Entre las plantas exóticas salta a la vista también la Cola de Mono, un cactus con una reproducción un poco compleja, “como mejor prospera es en injerto”, dice Quiñones Izquierdo.
Atalaya 1 es ejemplo de cuánto puede lograrse para cultivar y preservar la existencia de plantas exóticas.
Al respecto el joven productor aseguró que estará iniciando el proyecto Eco-sistemas que va a beneficiar a las áreas tanto urbanas como rurales, con la introducción de la abeja nativa NB 6 y el uso de la flora melífera en diseños de jardines que se van a aplicar en terrazas, patios y azoteas, lo que sin dudas también aportará a la belleza de nuestros paisajes en ciudades y campos.