Mayabeque, Cuba: Andrés Calderón Pulido es de los educadores que reivindican el valor de la profesión desde el ejemplo personal. Su entrega en el aula y su compromiso con la formación de los alumnos lo distinguen dentro del magisterio en Madruga.
En estos momentos en que los hogares vuelven a ser escuelas a consecuencia de la situación epidemiológica Andrés se siente apoyado pero no descuida su rol como maestro.
“Los padres se han convertido en maestros, los primos, abuelos, tíos, la familia en general, pero nosotros los maestros estamos ahí. Con la experiencia de la primera etapa, y de esta ahora, me ayuda a llegar un poco más a mis estudiantes”, explicó Calderón Pulido.
La creación de un grupo de WhatsApp, denominado Aviso Escolar le permite al maestro Andrés mantener el vínculo constante con sus alumnos y la familia, pero además la visita a los hogares forma parte de su actividad diaria.
Ahora otra misión lo espera y aunque seguirá atento a sus alumnos, está consciente de que servir es darse.
“En nuestro municipio hicieron el llamado para ver quién estaba dispuesto a cooperar y yo di mi paso al frente y en este momento estoy esperando para cruzar a la zona roja y de esta forma contribuir a la lucha contra la Covid-19 en nuestro país”, explicó Andrés.
Una vez más se crece ante la adversidad. Lo hace por la firmeza y el coraje de su pueblo. (IVP)