Concluye el 2021 y será recordado por las tristezas y alegrías que marcaron el acontecer de los cubanos en los últimos 12 meses.
De un lado la pérdida de familiares, amigos, colegas, todos víctimas de la Covid-19 y de otro la confianza en la ciencia que nos trajo la vacunación masiva y nos devolvió la esperanza.
El 2021 alzó la varilla de los desafíos y al enfrentamiento a la pandemia hubo que sumar fuerzas para enfrentar una guerra no convencional dotada de potentes herramientas usadas con malsana intencionalidad para destruirnos.
Y aquí estamos, con tiempo para seguir amando y creando con nuestra terca cubanía hasta hacer realidad nuestros sueños contra no pocos vientos y mareas.
Pandemia, bloqueo reforzado, campañas mediáticas, manipulaciones, intentos injerencistas dejaron lecciones bien aprendidas para un pueblo que luchó duro en este 2021.
Primero la victoria será siempre de los que tienen la razón y la defienden sin amilanarse ni rendirse.
Segundo solo un sistema social socialista que pone al hombre en el centro de sus prioridades puede enfrentar con acierto una pandemia como la Covid-19.
Tercero y no menos importante, un pueblo unido con madurez política y principios en los que cree y profundas convicciones no podrá jamás ser derrotado por el odio, la prepotencia y la injusticia.
Lecciones aprendidas y demostradas en este 2021 que se va y nos deja mucho por hacer en el año nuevo al interno del país. Otros retos como valorizar el peso cubano, ser racional en los precios, atender a personas y comunidades en situación de vulnerabilidad, destacar la Empresa Estatal Socialista como modelo de nuestro sistema y fomentar la autonomía municipal.
Responder también con la fuerza y el corazón de un país a los que nos adversan y sobre todo no olvidar ser feliz porque nos ganamos con creces el derecho a la alegría. (IVP)