En tiempos en los que se vale la organización y la disciplina como estilos de vida, actitudes y conductas para la convivencia armónica de la comunidad o en un centro de trabajo, aún muchas personas no lo ven así.
Después de casi dos años de pandemia y de mucho tiempo en que cesaron la mayoría de los servicios a la población, cerraron entidades para evitar aglomeraciones o por problema de personal enfermo por Covid-19.
Hoy reabren prestaciones de gran demanda, reaniman actividades en diversos sectores y la vida comienza a tomar una nueva tónica.
Pero ojo, cuidado con todo lo que se pretende si no tienen en cuenta el orden para lograr cada propósito, teniendo en cuenta que el coronavirus ronda por todos lados y no existen personas exentas del contagio.
Volver a la normalidad significa cumplir las medidas preventivas para no enfermar, sin embargo el comportamiento de muchos está muy alejado del valor de la disciplina que exige la capacidad de actuar de forma ordenada y hacen caso omiso a las advertencias sanitarias poniendo en riesgo su vida y la de quienes les rodean.
Por ejemplo, los días de pago en cadecas, correos y bancos desde las primeras horas del día ancianos de edad avanzada pernoctan en estos lugares sentados en el suelo, haciendo aglomeraciones y quitándose la mascarilla.
En tiendas de productos de altas demandas también abundan los grupos, además de los muchachos que en horario nocturno deambulan por las principales arterias de Güines.
Estos son algunos ejemplos de como se violan las medidas en tiempos en los que se regresa a la nueva normalidad.
Ante este escenario estamos a tiempo de detener y enfrentar a la Covid-19 y de esta manera podemos retomar la vida con una nueva tónica. (YQR)
Indira La O Herrera
Periodista en Radio Mayabeque
